DIA INTERNACIONAL DEL LAICISMO Y DE LA LIBERTAD DE CONCIENCIA

       Sumándome al día Internacional del Laicismo y la Libertad de conciencia, sintetizo las principales ideas del Manifiesto publicado por Europa laica.

      Cada 9 de diciembre se celebra el Día Internacional del Laicismo y la Libertad de Conciencia, porque en esta fecha en 1905 se publicó en Francia la ley de separación del Estado de las iglesias y, en nuestro país, tras la instauración de la II República el 14 de abril de 1931, el mismo día 9 de diciembre se aprobó por mayoría absoluta su Constitución, que decretaba la misma separación del Estado y de la Iglesia. Sin embargo, el golpe de Estado franquista de 1936 acabó con la esperanza democrática y laica que auguraba la Constitución republicana e instauró el nacional-catolicismo. La restauración borbónica en Juan Carlos que siguió a la muerte del dictador en 1975, mantuvo este nacional-catolicismo, ya que, a pesar de que el art. 16,3 de la nueva Constitución  afirmaba que "ninguna confesión religiosas tendrá carácter estatal", a los pocos días de la ratificación de la misma Constitución, el 3 de Enero de 1979, se firman los Acuerdos entre el Estado español y la Santa Sede, que conceden desorbitadas prerrogativas jurídicas, educativas y económicas a la Iglesia católica y posteriormente son ratificadas por la Ley de libertad religiosa de 1980.

 

     La Constitución del 1978 ha propiciado el avance en algunos asuntos sociales, pero  las iglesias, en particular la católica, siguen percibiendo sumas ingentes del erario público. Se estima que la Iglesia católica recibe unos 13.000 millones de euros anuales entre asignaciones directas, exenciones de impuestos y otras fuentes. Con ello
se contraviene el único compromiso asumido por la Iglesia en aquellos Acuerdos: el de su autofinanciación.

     En estos Acuerdos se ha hecho entrega a la Iglesia católica de la educación de las sucesivas generaciones, al mantener la asignatura de Religión en el currículo escolar, siendo impartida por docentes elegidos por los obispos y pagados por dinero público. Como también es conocido, en estos Centros y otros lugares, el clero católico ha abusado sexualmente de estos niños y niñas, habiéndolo ocultado con frecuencia la jerarquía eclesiástica y protegido a los culpables.  El informe del Defensor del Pueblo es un paso para acabar con este silencio e impunidad, pero se está intentando que no sea la misma Iglesia católica quien asuma las reparaciones económicas, sino el Estado. 

      Por si esto fuera poco, a la Iglesia católica se le permite    adueñarse de bienes públicos por el procedimiento de la inmatriculación (es decir: que para inscribir un bien en el registro de la propiedad bastaba, hasta hace poco, la sola palabra del obispo, sin necesidad de  aportar ninguna documentación). Así se ha apoderado la jerarquía eclesiástica de más de 100.000 bienes  de un valor incalculable.

      Más allá de nuestras fronteras la religión interfiere en la vida de la gente con  intensidad y frecuencia aterradoras. Además de causar o justificar guerras, provoca la discriminación y el maltrato de colectivos minoritarios (étnicos, sexuales...) y de las mujeres. Hay países donde se practica la mutilación genital, en otros se les impide el acceso a la educación y a puestos en la gestión pública, se les obliga a cubrirse la cara o a no hablar en público... Las religiones ignoran que los derechos humanos son de
todos y están por encima de sus prejuicios y dogmas.

      Por todo ello sigue siendo imprescindible que celebremos el Día Internacional del Laicismo y la Libertad de Conciencia, para recordar que las creencias de grupos particulares no deben interferir ni determinar la gestión de lo público.  Con este motivo, junto a Europa Laica. se exige:

• La denuncia y derogación de los Acuerdos de 1979 con la Santa Sede, así como los de 1992 con otras confesiones. Y la sustitución de la confesional Ley de Libertad Religiosa por una Ley integral de Libertad de Conciencia, como la que propone Europa Laica.

• Revertir las denominadas “inmatriculaciones” por las que la Iglesia católica se ha apropiado de unos 100.000 bienes públicos.

• Que la enseñanza de la Religión salga de la Escuela. Esta debe ser laica y gratuita. del mismo modo que otros derechos adquiridos, como la sanidad, la vivienda y el cuidado de la dependencia, deben seguir siendo públicos, evitando la privatización de los mismos.

• En referencia al problema de la pederastia clerical, se exige la reparación de daños hasta donde sea posible, la exigencia de responsabilidades y la prevención de futuros abusos.  Así como la imprescriptibilidad de los delitos y la
entrega de toda la información sobre los mismos que posee la Iglesia y debe ser también ella quien pague las indemnizaciones a las víctimas. 

• Finalmente, debe obligarse a Israel a que cese en la impunidad del genocidio del pueblo palestino, amparándose en la falaz pretensión de ser el único pueblo elegido por Dios, lo que es una muestra arbitraria y nefasta de la influencia de la religión en acciones inhumanas.